Representantes de Sistemas Integrados de Gestión (SIG) de diferentes tipos de envase y sectores industriales y expertos de ITENE presentaron las nuevas obligaciones para gestionar la Responsabilidad Ampliada del Productor en una sesión online que organizará este centro tecnológico el próximo 7 de noviembre.

En la Sesión PechaKucha online ¿Cómo gestionar la Responsabilidad Ampliada del Productor?, se abordó la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP) que el Real Decreto de Envases y Residuos de Envases incorporó por primera vez en España para los envases industriales y comerciales, de tal manera que los envasadores, importadores y adquirientes intracomunitarios deban hacerse cargo de organizar y financiar la gestión de los residuos de envases que pongan en el mercado.

En la sesión que organizó ITENE el 7 de noviembre de 10.30 a 13.00h, César Aliaga, Responsable de la Unidad de Envases y Economía Circular del centro tecnológico, ahondó en las novedades que introduce el Real Decreto de Envases y Residuos de Envases respecto a la Responsabilidad Ampliada del Productor y las alternativas disponibles para su cumplimiento. Además, se identificaron las diferencias entre un sistema individual y colectivo de responsabilidad ampliada del productor (SIRAP o SCRAP).

Además, la jornada incluyó una Sesión Pechakucha de los SCRAP emergentes, sistemas colectivos de varios de los actores implicados que hacen posible que las empresas cumplan con sus obligaciones. En ella, cada empresa trasladó su visión en una presentación PechaKucha (20 diapositivas explicadas en 20 segundos cada una). Esta sección incluyó la participación de representantes de diferentes Sistemas Integrados de Gestión (SIG) de diferentes tipos de envase y sectores industriales, entre ellos SCRAP CARTÓN CIRCULAR, SCRAP ENVALORA, SCRAP GENCI, SCRAP IMPLICA, PROCIRCULAR, PUNTO GRETA y RECYCLIA.

La Responsabilidad Ampliada del Productor fue introducida en España por primera vez en la Directiva (UE) 94/62/CE sobre envases y residuos de envases. Anteriormente se aplicaba de manera obligatoria solo a los envases domésticos, siendo voluntario para los envases comerciales e industriales, una situación que modificó el Real Decreto aprobado en diciembre de 2022 por el Consejo de Ministros. El objetivo de esta media es que los productores asuman los costes de la gestión y el tratamiento de los envases una vez que se convierten en residuos y son desechados por los consumidores o los poseedores finales.