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El artesano cervecero y el arte de la codificación

  • Publicado el 12 de Noviembre de 2024

Las paradas de producción y los costos imprevistos debido a sistemas de marcado defectuosos representaron importantes desafíos para la mayor cervecería de Arizona, Four Peaks. Los frecuentes atascos en las cabezas de impresión afectaron gravemente la eficiencia de la producción. La solución llegó con el cambio a la tecnología de impresión innovadora de LEIBINGER. Gracias a la tecnología patentada de sellado de boquillas en las impresoras LEIBINGER, los atascos son cosa del pasado, garantizando una producción fluida, ininterrumpida y con la máxima eficiencia.

El artesano cervecero y el arte de la codificación

Desde que se fundara en el año 1996, Four Peaks ha liderado la industria de la cerveza artesana en los Estados Unidos y se ha convertido en una marca de culto y en la cervecera más grande de Arizona. Famosa por ser la creadora de cervezas tan extraordinarias como Kilt Lifter y Wow Wheat, en 2016 Four Peaks fue adquirida por el gigante cervecero Anheuser Busch, que la modernizó para convertirla en una empresa altamente eficiente. A ello contribuyó decisivamente la persona encargada de garantizar el elevado nivel tanto de calidad como de cantidad de la casa: Gary Fogg, Jefe de Producción desde 2018.

El reto: Garantizar el consumo óptimo mediante una correcta codificación

Para disfrutar al máximo de la cerveza artesanal, hay que consumirla en condiciones óptimas. Por ello, Four Peaks imprime la fecha de caducidad en cada lata o botella de cerveza que produce, animando a sus clientes a consumir la cerveza dentro de los dos meses siguientes a su salida de la fábrica. Esto ayuda a asegurar la calidad, pero también puede suponer un dolor de cabeza para gente como Gary, dado que imprimir la fecha de caducidad en una lata de cerveza puede ser una tarea problemática a menos que cuentes con los equipos adecuados. Hoy Gary puede estar tranquilo, con una impresora LEIBINGER instalada en cada línea de producción, pero no siempre ha sido así.

Antes de instalar las impresoras LEIBINGER, los problemas de calidad provocados por el atascamiento de los cabezales de impresión eran recurrentes. Cada 15 minutos debía comprobarse la legibilidad de la impresión y, si la fecha de caducidad no se podía leer claramente, la línea de producción se paraba —a veces incluso hasta una hora— para poder limpiar el cabezal de impresión.

Con 250 latas saliendo de la línea cada minuto, Gary podía llegar a encontrarse en un abrir y cerrar de ojos con hasta 4.000 cervezas mal impresas. Eso significaba o bien tirar la cerveza, o bien invertir una cantidad sustancial de tiempo y esfuerzo en limpiar y volver a marcar las latas. Y esto ocurría al menos una vez por semana, a veces incluso todos los días.

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La solución: Escuchar la voz de la experiencia

No era la primera vez que Gary se enfrentaba a este problema, por eso desde el principio tuvo claro que LEIBINGER era la solución. Cuando inició su trayectoria profesional en una de las empresas productoras de bebidas más grandes del país, Gary recuerda problemas similares con las máquinas de codificación: "Imprimíamos 24 horas al día, 7 días a la semana, y teníamos problemas con todas las marcas de impresoras. Siempre se producía algún paro en la producción que hacía que nuestra productividad descendiera drásticamente".

La solución al problema vino de la mano de Tim Robinson, de RMH Systems, un especialista en máquinas de impresión cuyo asesoramiento y apoyo resultarían clave en la carrera de Gary. A fin de garantizar la continuidad de las operaciones, Tim sustituyó entonces la máquina problemática por una impresora LEIBINGER, y así es como Gary se dio cuenta de que LEIBINGER trabajaba de forma confiable allí donde otras marcas fallaban: "Cada vez que Tim se acercaba a la planta, poníamos una LEIBINGER a trabajar y funcionaba perfectamente en cuanto la sacábamos de la caja".

En 2009, ya incorporado a Four Peaks Brewery, Gary volvió a encontrarse con los mismos problemas con la misma combinación de marcas. Y lo tuvo claro: sustituyó todas inmediatamente por impresoras LEIBINGER. "Las dos impresoras que utilizábamos cuando me incorporé a la empresa creo que acabaron en un basurero. Esas impresoras no se las regalarías ni al peor de tus enemigos."

El impacto en la productividad fue instantáneo: "Cuando me incorporé a Four Peaks teníamos que limpiar las impresoras como mínimo una vez a la semana, a veces incluso todos los días. Ahora no las limpiamos ni siquiera una vez al mes". Gary admite que, de hecho, podrían incluso prescindir del calendario de limpieza actual: "A veces creo que limpiamos los cabezales simplemente por diversión".

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La sostenibilidad, una ventaja competitiva

Pero las impresoras LEIBINGER no solo permiten ahorrar tiempo. La limpieza de los cabezales de impresión requiere el uso de disolventes, que pueden tener un impacto muy perjudicial en el medio ambiente. La ampliación de los intervalos de limpieza, por tanto, implica el empleo de menos disolvente, lo cual redunda en un menor impacto medioambiental y también, naturalmente, en una reducción del gasto.

Gary también destaca las ventajas de sostenibilidad de los cartuchos LEIBINGER: "Están diseñados para vaciarse por completo, por lo que no generan residuos tóxicos. Con otros cartuchos, tenía que vaciar el disolvente y tinta residual en un depósito y encargar el vaciado de este depósito una vez al mes a una empresa especializada para su correcta eliminación. Esto, naturalmente, nos costaba tiempo y dinero".

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Si no soportas el calor...

Las fábricas de cerveza pueden ser lugares muy ajetreados, calurosos y húmedos. En estas condiciones, imprimir correctamente puede ser complicado para algunas impresoras, aunque no para LEIBINGER: "He visto máquinas LEIBINGER funcionando perfectamente en lo que posiblemente sean las condiciones más extremas que he visto jamás, por ejemplo encima de un túnel de pasteurizado, donde el aire es húmedo, caliente y sucio. Pues ahí estaba la LEIBINGER funcionando como si nada".

Una vez tuvimos también un problema con la impresión a causa de la condensación en el exterior de las botellas. La tinta amarilla de pigmentación suave que Gary estaba utilizando en ese momento se cuarteaba en lugar de adherirse a la superficie del cristal. Tim sugirió cambiar a una tinta plateada de pigmentación dura, que se adhería mejor, y recordó otra de las ventajas clave que ofrecen las impresoras LEIBINGER frente a otras marcas: "En algunas máquinas, una vez que has decidido utilizar una tinta determinada luego es muy difícil cambiar. Si cambias de tinta, tienes que cambiar también las boquillas, los osciladores, por lo que es algo que nunca recomendamos. Con LEIBINGER, basta con enjuagarla, poner la tinta nueva y reanudar la impresión".

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El resultado: Centrados en la calidad

La relación entre Gary y Tim se enmarca dentro del compromiso de LEIBINGER de ofrecer asistencia personalizada y de proximidad a sus clientes en todo el mundo. LEIBINGER colabora estrechamente con una extensa red de socios locales que no solo conocen el producto a la perfección, sino que pueden responder rápidamente a cualquier incidencia presentándose en el lugar y asesorando de manera competente.

Tim también cree que LEIBINGER tiene un enfoque diferente al de otros fabricantes de impresoras: "Parece que las demás marcas fabrican sus productos pensando en el gasto de mantenimiento anual. Siempre hay algo que hay que cambiar cada año, se haya usado mucho o poco el equipo. LEIBINGER, por el contrario, está ahí para vender impresoras, no para intentar ganar dinero con las piezas de repuesto".

Four Peaks y LEIBINGER son dos socios que se entienden a la perfección, puesto que ambas empresas basan su éxito en la calidad, una visión que Gary resume perfectamente: "En dos palabras: nuestro trabajo consiste en elaborar una gran cerveza y hacerla llegar a nuestros clientes para aplacar su sed. La tarea de codificar productos es, simplemente, garantizar que el marcado sea legible y repetible y que no se produzcan paros en la producción. Ni más, ni menos. Y esto es precisamente lo que nos ofrece LEIBINGER desde hace años".

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